Es distinto del bautismo con agua. El bautismo de Juan es así mismo contrastado en este:
Hch 11:16 Entonces me acordé de las palabras del Señor, cuando dijo: "Juan bautizó con agua, pero vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo."
Mat 3:11 Yo a la verdad os bautizo con agua para arrepentimiento, pero el que viene detrás de mí es más poderoso que yo, a quien no soy digno de quitarle las sandalias; El os bautizará con el Espíritu Santo y con fuego.
El bautismo cristiano aunque distinto, era con vísperas a la recepción del Espíritu santo.
Hch 2:38 Y Pedro les dijo: Arrepentíos y sed bautizados cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de vuestros pecados, y recibiréis el don del Espíritu Santo.
Pero no lo confiere:
Hch 19:5 Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús.
Hch 19:6 Y cuando Pablo les impuso las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo, y hablaban en lenguas y profetizaban.
El bautismo del Espíritu Santo tuvo lugar en Pentecostés. El Señor Jesús dijo a sus Discípulos
Hechos 1:5 pues Juan bautizó con agua, pero vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de pocos días.
En el Pentecostés los santos fueron bautizados por el espíritu santo.
1Co 12:13 Porque por un solo Espíritu somos todos bautizados en un cuerpo, ya sean judíos o gentiles, ya sean siervos o libres; y todos hemos bebido de un mismo Espíritu.
Esto concuerda con el inicio de la iglesia en Pentecostés, y nos dice que nadie puede venir a formar parte del cuerpo de Cristo a no ser que el espíritu Santo more en el, siendo así iniciado en él un cuerpo formado y caracterizado por el bautismo de Espíritu Santo una vez por todas.
Copiado del Nuevo diccionario Bíblico Ilustrado (VILA ESCUAIN).
COMENTARIO:
Aunque el bautizo por sumersión, seguido después de un arrepentimiento de pecados y confesión de Cristo como nuestro salvador, es un paso de obediencia a la palabra de Dios., No deja en ningún momento invalidado el bautismo del espíritu santo enseñado en la palabra, uno es muy distinto del otro, siendo este último No concedido por hombre alguno o entidad eclesiástica, si no que proviene únicamente de Dios.
Es muy importante saber de este tema, aquí solo una exponemos una breve explicación para darle lugar a la palabra de Dios que obre en el lector, a preguntar o investigar más de este enseñanza bíblica tan importante para los verdaderos cristianos.
Dios les bendiga.
Santa María Ixhuatán Nov. 2011
